Add parallel Print Page Options

27 Una vez introducidos a la presencia del Consejo Supremo, el sumo sacerdote procedió a interrogarlos:

28 — Os teníamos terminantemente prohibido enseñar en nombre de ese. Pero resulta que habéis infestado Jerusalén con vuestra enseñanza, y encima queréis hacernos responsables de la muerte de ese hombre.

29 Pedro y los otros apóstoles respondieron:

— Debemos obedecer a Dios antes que a los hombres.

Read full chapter